Las mujeres de todo México han convocado un Paro Nacional el 9 de marzo para poner fin a la violencia contra las mujeres.
El mensaje se ha extendido rápidamente a través de Internet, la radio, la televisión y el boca a boca, ya que parece ser de conocimiento general. El movimiento feminista simbolizado por la protesta creativa “Un violador en tu camino” y los pañuelos verdes han centrado la furia y la desesperación de las mujeres mexicanas. Ahora, al parecer, las mujeres están listas para una demostración masiva de su poder.
La huelga ha sido convocada bajo los lemas:
“Un día sin nosotras”
“El nueve ninguna se mueve”
“Si las mujeres no valemos nada para México, que México se queda sin lo que producimos y sin lo que consumimos”
“Si no escuchan nuestros gritos, si no escuchan nuestro llanto, escuchen la economía que manejamos”
Para ver estas imágenes y temas, una/o supondría que esta huelga es una verdadera acción feminista. Sin embargo, ha habido cierta controversia, ya que algunos han sugerido que la huelga está siendo utilizada por la derecha política. El Presidente, irónicamente, se ha metido en una trampa y se ha posicionado, a partir de este escrito, en contra de la huelga de las mujeres. Habiendo sido empujado por su oposición, y tropezando, está cayendo justo donde lo quieren.
Según Animal Político, la idea del Paro Nacional se originó con el Colectivo “Las Brujas del Mar”, un grupo de feministas de Veracruz, el estado con los peores niveles de violencia, tanto feminicidios como asesinatos por motivos políticos.
Debido a que el 8 de marzo, Día Internacional de las Mujeres, siempre ha sido un símbolo genuino del movimiento feminista internacional, nos queda claro que cualquier paro nacional de trabajadoras solo puede ser una verdadera expresión del deseo de las mujeres de ser libres.
Por lo tanto, es la opinión de SOLIDARIDAD que todas las trabajadoras de México y más allá deben unirse al Paro Nacional y hacerlo suyo. Únase a los eventos feministas en su área y luchemos juntos por un mundo libre de violencia de género.
¡Ni una mujer en las calles!
¡Ni una mujer en los trabajos!
¡Ni una niña en las escuelas!
¡Ni una joven en las universidades!
¡Ni una mujer comprando!
