Expresidente de la empresa DESA sentenciado a 22.5 años de cárcel por el asesinato de Berta Cáceres

Uno de los autores del asesinato de la ambientalista hondureña, Berta Cáceres, fue condenado a 22 años de cárcel el 21 de junio de 2022.

El entonces presidente de la empresa Desarrollos Energéticos S. A. (DESA), Roberto David Castillo Mejía, ordenó el asesinato, según la corte hondureña. 

Cáceres se opuso al proyecto Hidroeléctrico “Agua Zarca” de DESA por sus daños ambientales y movilizó a la comunidad contra su desarrollo como cofundadora del Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH). 

Castillo es el octavo responsable condenado por las cortes hondureñas. Sin embargo, el COPINH denunció al gobierno por no enjuiciar a los autores intelectuales del asesinato. 

“Hasta el momento el Ministerio Público dirigido por Óscar Chinchilla y en específico de la Fiscalía de Delitos Contra la Vida no han realizado ni un solo avance real en esclarecer la autoría intelectual en este caso. Exigimos que se cumpla con el deber del Ministerio Público de enjuiciar a los autores intelectuales,” dijo el COPINH en su comunicado 13.

“Está autoría intelectual está compuesta por los hermanos Jacobo, José Eduardo, y Pedro Atala Zablah y por Daniel Atala Midence.”

La familia Atala son banqueros y empresarios poderosos en Honduras. Según el reportaje del The Intercept, los documentos financieros señalan que una transferencia de US$1.7 millones fue enviada de Atala hasta Concretos del Caribe S.A. Durante las 48 horas  en que se efectuó la transferencia, Cáceres fue ultimada en su casa en La Esperanza, Honduras, el 3 de marzo de 2016.  Un ambientalista mexicano también fue herido, al recibir un disparo; pero sobrevivió. 

El año anterior a su asesinato, Cáceres había recibido el Premio Medioambiental Goldman por su resistencia y liderazgo contra el desarrollo de proyectos que atentan contra el medio ambiente y las necesidades de los pueblos Indígenas en Honduras. El premio le dió un perfil internacional a Cáceres y su asesinato fue condenado a nivel mundial. Esto forzó al gobierno hondureño del Presidente Juan Orlando Hernández a encontrar a los asesinos. 

COPINH sigue luchando para conseguir el respeto para los derechos de los pueblos Indígenas Lencas. El 27 de junio la organización presentó sus demandas a la Presidenta Xiomara Castro de Honduras, quien asumió la presidencia en enero de 2022. COPINH exige “la toma de medidas inmediatas para la eliminación de conflictividades territoriales y de disminución de la desigualdad y la pobreza del pueblo Lenca”. También demandó “el compromiso del reconocimiento del Estado de Honduras de los derechos a la tierra, territorios y derechos de las comunidades indígenas en la realización de cambios normativos, administrativos y jurídicos para la protección integral de derechos de pueblos indígenas.”

Foto de coolloud, licenciado bajo Creative Commons: Berta Cáceres en las oficinas del COPINH (Consejo de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras) en La Esperanza, Intibucá, Honduras. La fotografía fue tomada el 3 de marzo 2015, 13 meses antes de su asesinato.

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